Dice un cuento Israelita, que un joven fue a visitar a un sabio consejero y le contó sobre las dudas que tenía acerca de sus sentimientos por su familia. El sabio lo escuchó, lo miró a los ojos y le dijo sólo una cosa: «Ámala». Y luego se calló.
El muchacho dijo: Pero, todavía tengo dudas … Ámala, le dijo de nuevo el sabio. Y, ante el desconsuelo del joven, después de un breve silencio, le dijo lo siguiente: Hijo, amar es una decisión, no un sentimiento.
Amar es dedicación y entrega. Amar es un verbo y el fruto de esa acción es el amor. El Amor es un ejercicio de jardinería. Arranque lo que hace mal, prepare el terreno, siembre, sea paciente, riegue y cuide. Esté preparado porque habrá plagas, sequías o excesos de lluvias, pero no por eso abandone su jardín.
Ame, es decir, acepte, valorice, respete, dé afecto, ternura, admire y comprenda. Simplemente, AME.
¿Sabes por qué?
- Porque la Inteligencia, sin amor, te hace perverso.
- La justicia, sin amor, te hace implacable.
- La diplomacia, sin amor, te hace hipócrita.
- El éxito, sin amor, te hace arrogante.
- La riqueza, sin amor, te hace avaricioso.
- La docilidad, sin amor, te hace servil.
- La pobreza, sin amor, te hace orgulloso.
- La belleza, sin amor, te hace ridículo.
- La autoridad, sin amor, te hace tirano.
- El trabajo, sin amor, te hace esclavo.
El amor Todo lo puede, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta, el amor nunca deja de ser Y LA VIDA SIN AMOR, NO TIENE SENTIDO. Desde ya te deseo, que sea el AMOR , el principal propósito, de poner en práctica en este 2024.
Anónimo